Qué negro dolor se eleva de las entrañas de la tierra y va subiendo por el aire como un grito de espanto, qué alarido es este, que ni oigo el retumbar de mi pulso de mi corazon, la ceniza cubre la sangre, y la hiel horada de muerte la guadaña.
Toda vida con su agasajo, su retiro, solaz guerrero
Qué negro dolor se eleva de las entrañas de la tierra y va subiendo por el aire como un grito de espanto, qué alarido es este, que ni oigo el retumbar de mi pulso de mi corazon, la ceniza cubre la sangre, y la hiel horada de muerte la guadaña.